¿Por qué los jóvenes no ahorran tanto como podrían?

Aunque siempre hay oportunidad de que puedan encauzar su relación con las finanzas, a los jóvenes les puede costar enfocarse en ahorrar dinero, y eso se debe a varios motivos que todos podemos entender.

  1. La falta de educación financiera. A la mayoría de los jóvenes no se les enseña educación financiera en los colegios o en la casa, y por eso les puede resultar difícil entender lo que significa ahorrar e invertir.
  2. No contar con experiencia. La mayoría de los jóvenes no tiene experiencia financiera ya que no tienen responsabilidades como pagos de servicios o gastos recurrentes. Además, si nunca han tenido problemas económicos, al tener el soporte de sus padres y familia, es probable que no valoren tanto la importancia del ahorro para su futuro.
  3. El gasto no se entiende en su real dimensión. Hoy la mayoría de las personas hemos desarrollado una cultura del gasto malentendida, ya que vivimos en una sociedad que nos dice que ser exitoso significa tener la capacidad de comprar muchas cosas. Es posible que un joven sienta una presión constante, de amigos o compañeros de trabajo, que  influencian para que gaste más de lo que debería. Si todos a tu alrededor compran mucho, es posible que quieras hacer lo mismo.
  4. Poca paciencia para el ahorro. Algunos jóvenes creen que gastar y mostrar lo que pueden adquirir en el presente es más importante que ahorrar para un futuro, que con 20 o 25 años, aún se ve muy lejano. Ahorrar a mediano o largo plazo requiere disciplina y paciencia para obtener un objetivo. A veces los jóvenes no tienen estas cualidades porque están acostumbrados a conseguir lo que buscan de manera inmediata.
  5. Rápido acceso al dinero. El mayor acceso al crédito permite conseguir tarjetas de crédito y préstamos de manera más rápida, lo que hace que los jóvenes sientan que tienen más dinero del que realmente poseen. Esto puede llevarlos a gastos excesivos y deudas insostenibles.
  6. Distinguir necesidades de deseos. Los jóvenes pueden gastar en cosas que no son tan importantes porque no pueden diferenciar entre lo que realmente necesitan y lo que simplemente quieren.

¿Cómo podemos cambiar esta situación? Necesitamos enseñar a los jóvenes sobre el manejo del dinero, fomentar la planificación financiera, destacar los beneficios del largo plazo y mostrar ejemplos de cómo el ahorro puede hacer una gran diferencia en sus vidas. Es hora de empezar a pensar en el futuro y en metas personales y profesionales. ¡Vamos, todos podemos hacerlo!